jueves, agosto 31, 2006

Cuestiones de misantropía


















Llevo un par de días en los que las únicas conversaciones mantenidas han sido a través de un teléfono o a través de la red. No hablo con nadie, salvo para pedir un kilo de ciruelas, una barra de pan o El País. De hecho, esta mañana ya no vocalizaba bien y me he dado cuenta a la mitad de la palabra ciruela. Yo pensaba que pronunciaba bien, pero los ojos extrañados de la frutera me confirmaban lo contrario. No obstante, al salir de la tienda ni siquiera estaba avergonzado pues había conseguido mi objetivo: un kilo de fruta entre kiwis y las dichosas ciruelas.

Cuando me paro a pensar en este asunto delante de los cuadros tan solitariamente iluminados por Hopper llego a la conclusión de que es el inevitable final al que estaba condenado como consecuencia de mi adicción a la misantropía: me gusta el silencio, me encuentro cómodo en él. A gusto entre los peces.

El único inconveniente de mi aislamiento es la ansiedad que experimento cada día camino de la panadería cuando me pregunto si ya habré perdido la capacidad del habla...

5 comentarios:

José Ignacio Montoto dijo...

Son los efectos secundarios de un fin de semana en la aborígena, suele ocurrir... No te preocupes creo que los espasmos se quitan volviendo allí, esto es algo parecido al hipo, o te pegan un susto o no se te quita...

paquito dijo...

ciluera?....cirulea?....aggghhhhh

GaLa® dijo...

Trankilo, lo superarás, naúfrago. Ya nos presentarás a tu pelota con carita pintada con la que hablas a diario.No recuerdo cómo se llamaba. Quédate aislado lejos de esta ciudad sofocante, lo entenderás cuando todo vuelva a la normalidad, cuando pongas pie en el asfaltao de esta civilación,la nuestra. Ofú qé caló,killo.

Anónimo dijo...

Aún recuerdo Tavira...
La playa, Enrique y yo, dos libros, el día entero y ni una palabra...
¡¡Socorro!!
¡¡Qué alguien me hable!!
¿Por qué eres tan raro?
Ciruela te daría yo...

Anónimo dijo...

Cabessaaa! como te vea por la calle te doy con el cajco!!!
Espero poder seguir leyendote de fois en quand.
Frase para la reflexión "La mejor cantidad de personas para formar un negocio es impar y menor de dos".

Un abrazo